La RPD contra la introducción de fuerzas de paz en Donbass

La autoproclamada República Popular de Donetsk ha rechazado categóricamente la decisión de introducir fuerzas de paz en Donbass, según ha declarado el presidente del Consejo Popular de la RPD, Andrei Purgin.

Poroshenko cree que la introducción de fuerzas de paz en Donbass haría desescalar la situación. A mediados de marzo, la Verkhovna Rada aprobó la propuesta del presidente Poroshenko de solicitar al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas el despliegue de fuerzas de paz y seguridad en el territorio de Ucrania.

Antes, Evgeny Perebiynis, representante del Ministerio de Asuntos Exteriores, explicó que en febrero se había enviado a la Unión Europea y Naciones Unidas una solicitud preliminar para la introducción de fuerzas de paz en el este del país. Stephane Dujarric, representante oficial del Secretario General de la ONU confirmó el 13 de marzo la recepción de la petición informal ucraniana. “Esto solo puede ocurrir por medio de una decisión del Consejo de Seguridad de la ONU. Estamos categóricamente en contra. Si entran fuerzas extranjeras, se quedan para siempre”, afirmó Purgin –RIA.ru.

En realidad, desde la misma aparición de la idea de introducir fuerzas de paz, estaba claro que no iba a haber entendimiento por una serie de razones.

1. Rusia no está de acuerdo con la presencia de fuerzas de paz de la OTAN, ya que en la práctica supondría una rastrera capitulación y supondría transferir control sobre la región a la junta.
2. Kiev y Estados Unidos no aceptarían cascos azules rusos o de países miembros del Pacto de Shanghái, ya que básicamente supondría una legalización del voentorg. 
3. Ya que la idea de las fuerzas de paz es contraria al acuerdo del 12 de febrero, su introducción no es posible en el marco actual de “tregua” debido a las declaraciones de todas las partes, que aseguran que buscan cumplir los acuerdos de Minsk.
4. La introducción de fuerzas de paz (exceptuando si fueran rusas) supondría la progresiva entrega del control de la frontera entre la RPD y la RPL y la Federación Rusa a las fuerzas de paz primero y a la junta después, lo que en la práctica supondría entregar la RPD y la PRL a la junta. La cuestión de la frontera, como ya quedó claro en el verano de 2014, es uno de los aspectos más importantes y es por eso que Estados Unidos y la junta exigen constantemente a Rusia que renuncie al control de su frontera con las Repúblicas Populares.

En realidad, la junta ha lanzado la idea de la introducción de fuerzas de paz como pretexto para frustrar la implementación de los acuerdos del 12 de febrero y en caso de rechazo culpar a la parte de Donetsk y Lugansk de querer continuar la guerra en lugar de admitir que es la junta la que no cumple los acuerdos de Minsk. Así que el tema de las fuerzas de paz tiene más de propagada que valor real.