El Ejército sirio ha recuperado el control de tres regiones logísticas, es decir las montañas de Al-Shumariyeh, la montaña de Al-Mohite y Tal Al-Hawa en el campo oriental de Homs (oeste).
Además de hacerse con el control de esas regiones, las fuerzas sirias han acabado con la vida de decenas de militantes, y han confiscado grandes cantidades de armas pertenecientes a los terroristas.
También, en otras operaciones de limpieza, el Ejército ha conseguido eliminar a decenas de terroristas en la estación de energía eléctrica de Tishreen, en la zona rural de Damasco, capital del país.
En la localidad de Al-Zabadani, en la misma ciudad, las tropas sirias aniquilaron a un gran número de hombres armados, logrando destruir además enormes cantidades de armas y municiones.
En la región de Al-Arquob, situada al noreste de la ciudad de Al-Nabek, en las afueras de Damasco, las fuerzas sirias han desactivado varios artefactos explosivos durante sus operaciones antiterroristas.
Los soldados han asesinado y herido a numerosos elementos del grupo terrorista denominado Brigada Al-Tawhid, en las afueras de las ciudades de Idlib (noroeste) y Alepo (noroeste).
En operaciones similares, las fuerzas sirias han generado grandes pérdidas a las bandas terroristas en los barrios de Al-Hamidiyeh, el antiguo aeropuerto, Al-Hweiqeh, Al-Ybeileh y Al-Rashidiyeh, en la ciudad oriental de Deir al-Zor.
En la provincia de Daraa (suroeste) y su zona rural, el Ejército ha destruido varios vehículos cargados con armas y municiones.
Cabe mencionar que, el lunes, las fuerzas del Ejército acabaron con la vida de más de 40 terroristas en diferentes ciudades.
Desde marzo de 2011, Siria vive una ola de violencia perpetrada por grupos terroristas apoyados por países extranjeros, con el fin de derrocar el Gobierno del presidente, Bashar al-Asad.
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