A punto de completarse el proceso de reorganización del Ejército de la República Popular de Donetsk.
Esta semana, el antiguo ministro de Defensa de la RPD Igor Strelkov anunció en las redes sociales que la Guardia Republicana había dejado de existir y que la mitad de su personal se había dispersado “a los cuatro vientos”.
En una entrevista con los corresponsales de la Agencia de Noticias de Kharkov, el
voluntario Alexander Matyushin, Varyag, afirmó que en realidad la Guardia Republicana de la RPD ha pasado por un proceso de reorganización por el que se ha convertido en parte del Cuerpo del Ejército. La base de la Guardia se ha convertido en una brigada motorizada separada, mientras que algunos batallones se han integrado en otras divisiones.
“Por ejemplo, el batallón en el que yo serví se ha convertido en un batallón separado de fuerzas especiales y ahora realiza las funciones habituales que realizaba la Guardia. Insisto, esto no quiere decir que la Guardia haya dejado de existir, la estructura básica tanto de oficiales como de soldados se ha mantenido en el servicio y continúa protegiendo las fronteras de nuestra joven república”, afirmó el miliciano.
Varyag insistió en que, dentro del proceso para unir a todas las unidades militares bajo un único comando, esta incorporación era inevitable, iba a ocurrir tarde o temprano. Esta reorganización, insistió el miliciano, tiene implicaciones importantes. “Después de todo, siempre he dicho que para conseguir una victoria era necesario establecer un comando único en el ejército. Las unidades de partisanos nunca lograrán derrotar a una ejército regular. ¿Cómo fuimos capaces de obtener tantas victorias en la campaña del año pasado? Les daré la respuesta. La verdad es que el año pasado, en la primera fase de la guerra, las tropas ucranianas tampoco sabían cómo luchar. La única parte del Ejército Ucraniano que era capaz de hacer algo, aunque con gran dificultad, eran los batallones voluntarios y las llamadas unidades de élite”, afirmó el miliciano.
En su opinión, también ellos aprendieron a luchar y a forjar el espíritu de lucha, al igual que lo hizo la milicia. Varyag afirmó que la milicia aprendió a luchar algo más rápidamente y la moral de los defensores de Donbass, a pesar de todos los problemas, sigue siendo más alta que la del ejército ucraniano. “Porque nosotros estamos en nuestra propia tierra y defendemos la propia existencia de nuestro pueblo y el futuro de nuestros hijos. En ningún caso quiero quitar mérito a quienes se levantaron para proteger a nuestra joven república desde el primer día de la guerra, pero la verdad es que antes de la creación del Cuerpo del Ejército no teníamos un ejército sino unos cuantos destacamentos semipartisanos”
La formación del Cuerpo del Ejército supone, según Varyag, el inicio de la transformación de la milicia en un ejército, por lo que era cuestión de tiempo que todos los grupos armados pasaran a formar parte del ejército o que se disolvieran. Entre los primeros batallones en unirse están la brigada de Slavyansk, Oplot, Kalmius y otros. Comenzó así a establecerse la disciplina militar normal en el ejército. “Muchos de los que no querían unirse al Cuerpo pero seguían defendiendo las fronteras de nuestra república se unieron a la Guardia en enero de este año. La Guardia Republicana está compuesta por unidades variadas de diferente composición ideológica, pero nos unía una cosa: la fidelidad a los ideales de la Primavera Rusa. La primera gran operación en la que participó la Guardia fue la operación de Uglegorsk-Debaltsevo, donde la Guardia jugó un papel importante”, recordó Varyag.
Posteriormente, continuó Varyag, la Guardia Republicana formó parte de la defensa de Donetsk desde la zona del municipio de Peski, donde contuvo al enemigo en dirección a Sarinsk, de la misma forma que hizo también en Shirokino [en el frente sur, junto a la costa del mar de Azov-Ed]. Cuando llegó el momento decisivo para la formación de una organización militar unificada, el comandante de los batallones de la Guardia Republicana, dejando de lado sus ambiciones personales, optó por unirse al ejército. “Al contrario que los cosacos, que no comprenden que ya han pasado los tiempos del Ataman [término tradicional para el líder cosaco-Ed], comprendemos que para derrotar el enemigo no podemos estar divididos y que necesitamos convertirnos en un ejército unificado”, concluyó el miliciano.
El proceso de reorganización de la Guardia Republicana tuvo lugar a principios del verano
Ilya Muromsky.
De hecho, la tan anticipada centralización y unificación de la gran mayoría de las unidades preparadas para el combate en el Ejército ya se ha producido. Los tiempos en los que podrían solaparse dos o más estructuras de poder han quedado definitivamente en el pasado. A consecuencia de ello, el proceso de reclutamiento para el ejército también está cambiando.
En la primera fase de la guerra, se aceptaban los voluntarios al azar: los voluntarios se presentaban en los puestos de la administración regional de Donetsk o en el antiguo edificio del SBU de Lugansk y se unían a la milicia. Más adelante, cuando las diferentes unidades se consolidaron y comenzaron a hacerse publicidad, los voluntarios podían elegir el grupo al que unirse: a la gente de Strelkov, a los cosacos, a Mozgovoy en Prizrak, a San Sanych en el equipo de respuesta rápida, a Kalmius, etc.
El siguiente paso fue la reorganización el Ministerio de Defensa de la RPD, tras lo que la oficina de reclutamiento comenzó a funcionar con un sistema más o menos definitivo de reclutamiento.
Tras el establecimiento el Cuerpo de la Milicia y la Guardia Republicana, las estructuras se fortalecieron y se centralizaron. En el momento actual llegamos al final del proceso de transformación de una milicia armada y unidades irregulares en ejército regular moderno.
Por supuesto, este camino no ha estado exento de errores. Fracasó, por ejemplo, el intento de coordinar las acciones de las milicias a través de Krasnodon [en la frontera con Rusia-Ed], cuando “Dolphin” y “Elbrus” no fueron capaces de lidiar con un gran conglomerado de grupos dispersos. A pesar de todo, las recién creadas brigadas se superaron en la batalla por Debaltsevo.
Se produjeron también otros problemas que siguen existiendo. Pero se trata de problemas normales, ya que crear un ejército regular en un periodo de tiempo tan corto no es tarea fácil. Tras un año y medio de guerra, podemos decir sin temor a equivocarnos que la República Popular de Donetsk ha creado un ejército completo. Creo que no hace falta repetir quién ayudó a crearlo.
Slavyangrad
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