Alchevsk, 9 de abril. El famoso líder de la milicia Alexei Mozgovoi ya es comandante de una brigada parte de la milicia popular de la República Popular de Lugansk. Pese a este puesto oficial, Mozgovoi es, hoy en día, uno de los mayores críticos de las autoridades de la república.
Orhan Dzhemal: Me interesa la situación política de la RPL, porque la guerra continúa, pero se habla mucho de la construcción del estado de post-guerra. Entiendo que la complejidad de este proceso se refleja claramente en Lugansk.
Alexei Mozgovoi: Es demasiado pronto para hablar de la construcción de post-guerra. Solo porque haya una tregua no quiere decir que haya paz. Prácticamente toda nuestra atención sigue estando en el frente.
Parece que muchos de los recientes héroes de la RPL, conocidos comandantes, han tenido dificultades con las autoridades de la república.
No son dificultades con las autoridades, sino con la política que ha seguido.
¿Cuál es esa política?
Digamos que no se corresponde a las demandas que el pueblo planteó en las marchas de marzo y abril del año pasado. Entonces declararon alto y claro que lo más importante era el bienestar del pueblo. ¿Y qué vemos ahora? Lo que queda del pueblo es la “P” en el nombre de la RPL.
En mi opinión, si vamos a construir algo nuevo, o a construir algo, digamos como parte de una nueva Rusia, Novorrusia, tenemos que alejarnos de todos los métodos anteriores de gobierno, todas las anteriores formas de relación con el pueblo y crear algo nuevo. Desde mi punto de vista, debe haber transparencia en todos los temas desde el principio. Transparencia y claridad para todos los residentes. Si un oficial da un paso, este debe ser comprensible. Si se toma una decisión, aunque no se discuta con la población, al menos tiene que hacerse de forma transparente. Para dejarlo claro: necesitas al pueblo o son solo burócratas.
¿Cuál es el proceso?
De hecho, hemos vuelto a las viejas formas. La corrupción está por las nubes. El uso de los recursos administrativos pertenece a la cabeza de la república, igual que antes correspondía al jefe de la región de Lugansk. La televisión y la prensa solo trabajan para mostrar cuánto amamos a nuestro líder. Igual que antes.
¿Tiene su unidad problemas con el comando militar?
Al principio intentaron desbandarnos. Por eso nos dijeron: “Os integraremos en el ejército de la RPL, pero solo como adición a unidades ya formadas”. Así que su tarea era dispersarnos, hacernos unirnos a unidades ya existentes para que así dejáramos de existir.
¿Ahora van a ser incluidos en la estructura militar que se está desarrollando?
Estamos integrados. Existimos como brigada. Estamos a las órdenes del comando militar de la RPL. Pero quiero decir algo sobre el completo bloqueo de la ayuda humanitaria que recibía nuestra división. Con ello dábamos de comer a la población local, tenemos cuatro comedores sociales, y venían a comer mineros, obreros de las fábricas, residentes de pueblos pequeños, estudiantes de guarderías y colegios. Lo compartíamos con la población local. También está bloqueado.
¿Qué está bloqueado?
Es imposible traer ayuda humanitaria.
Llega ayuda humanitaria enviada por la población rusa. ¿Dónde aparecen los obstáculos?
De todas partes, incluyendo de la Aduana de la Federación Rusa. Probablemente hayamos visto el último cargamento. En Ekaterimburgo, una unidad completa de voluntarios reunieron y trajeron con ellos un cargamento de ayuda humanitaria, también para la población civil. Trajeron sus pertenencias, trajeron alimentos, medicinas y equipamiento para los hospitales. No se permitió el paso al cargamento porque excedía el peso máximo. Las cinco toneladas se quedaron bloqueadas en la frontera. ¿Quién puede poner un límite de peso a la ayuda humanitaria, si es humanitaria? En general nos están cortando el suministro para hacernos dependientes. Es una forma de control.
¿Hay un suministro centralizado de ayuda humanitaria? ¿Les llega algo de ahí?
Cada vez que vemos en los medios la llegada de los convoyes hay un espectáculo, pero no he visto nunca cómo se distribuye esta ayuda. ¿Por qué no están las mismas cámaras grabando la distribución de esta ayuda en pueblos remotos?
¿Llega a pueblos remotos?
No lo sé. No voy a especular. Recientemente hemos estado en el pueblo de Frunze hablando con un abuelo que ha trabajado 40 años en el ferrocarril. Y en nueve meses no ha recibido nada.
¿Lo asocia a la burocracia o a la corrupción?
La guerra es interesante: unos mueren y otros se aprovechan para sacar beneficio. La ayuda humanitaria es una de esas fuentes de ingresos. Cuanta más haya, más se robará.
¿Sabe quién desvía el cargamento y quién se aprovecha?
No lo he investigado, así que no puedo decirlo. Sin saber a ciencia cierta quién es culpable, solo estaría extendiendo rumores. Pero, aunque no puedo dar nombres específicos, es responsabilidad del Gobierno y la administración.
¿Qué formula propondría para la distribución de la ayuda humanitaria?
Como hemos hecho desde el principio, dirigiéndola. Un hospital infantil u otra institución nos facilita una lista de sus necesidades. Entregamos la lista a las organizaciones humanitarias, envían la ayuda según la lista y entregamos el cargamento a quienes lo necesitan ante las cámaras.
¿Quiere que las organizaciones privadas trabajen directamente con ustedes?
Yo no quiero nada y mucho menos lo exijo. Solo veo la diferencia entre las entregas del Gobierno, que de hecho nadie controla, y los proveedores privados, que no van a permitir que su cargamento desaparezca por ahí.
Hay grandes empresas en este territorio. ¿Está a favor de la nacionalización?
La nacionalización debe ser razonable. Muchas acciones del complejo metalúrgico de Alchevsk pertenecen a bancos de Moscú, la otra parte a gente de Dniepropetrovsk, no solo a Kolomoisky. Pero ahora no se puede tocar la fábrica, porque está ligada a Europa. Si actuamos de forma apresurada, la fábrica se quedará sin mercado para sus productos. Recuperar ese mercado sería muy complicado. La fábrica da trabajo a 15.000 personas. Algunos querían presionar, pero les explicamos que no era posible hacerlo. Se puede nacionalizar pero, ¿a quién va a dar trabajo sin un mercado externo? Debemos verlo con cuidado de aquí en adelante.
La Verkhovna Rada ha adoptado una ley sobre los territorios ocupados. ¿Qué le parece?
Para ser sincero, no he profundizado en ello. No me puedo tomar en serio las leyes adoptadas por la Rada y el actual Gobierno de Kiev.
¿Se puede permitir una situación en la que se celebren elecciones según las leyes ucranianas?
Ahora mismo vivimos bajo las viejas leyes ucranianas. Nada ha cambiado, así que no sería sorprendente. Muchos antiguos empleados y policías han vuelto a sus posiciones sin ninguna investigación. Comprendo que necesitamos expertos, pero se acepta a cualquiera que haya trabajado en Severodonetsk (donde ahora se encuentra la administración de la región de Lugansk-Ed) y ahora trabaja para nosotros.
¿Acepta a esa gente en Alchevsk?
Sí, no insistimos en este asunto. Somos una unidad militar. Siempre he dicho que el Gobierno civil debe ser para gente en ropas civiles.
¿Son altos cargos?
Bueno, en lo que respecta a posiciones militares, están los que antes vestían de sargento y ahora son coroneles.
¿Se celebrarán elecciones en Alchevsk?
Se están preparando. Es lo que ha decidido nuestro gobierno. Ahora mismo todo está en un punto muerto. Resulta que las autoridades de la república pueden anunciar la fecha de las elecciones justo antes, incluso unas horas antes de las elecciones. ¿Quién tiene tiempo para prepararse?
¿Va a mantenerse en el ámbito militar o va a participar en política?
Por supuesto que lo haré.
¿Cómo?
Es un secreto. Dejemos que sufran.
¿Qué sería una victoria en esta guerra civil?
En esta guerra no habrá victoria.
¿Cuándo se podrá parar?
Pararemos cuando la mayor parte de la gente comprenda que está siendo utilizada para beneficio de otros. En un lado y en el otro. Nada nuevo en ello. La guerra siempre ha sido y siempre será un negocio. La mayor victoria llegará si creamos un poder que piense en la gente. No una victoria en la guerra, sino sobre nosotros, sobre nuestras conciencias.
¿La gente es consciente de que algo va mal?
De que hay algo mal, sí. No tan rápido como nos gustaría, pero antes o después las dos partes en conflicto encontrarán un lenguaje común. Solo entonces podremos hablar de forma diferente y entre nosotros. Solo entonces podremos crear algo verdaderamente popular. Mientras la gente esté distraída con el “suicidio”, no crearemos nada aquí. Los que cargan con la bandera negra a nuestras espaldas seguirán haciéndolo.
LONG LIFE TO MOTHER LAND RUSSIA. LONG LIFE TO PRESIDENT VLADIMIR PUTIN. LONG LIFE TO THE DUMA. LONG LIFE TO THE SPETSNAZ SOLDIERS.
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