El portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, anunció el viernes que la posición del Gobierno de Estados Unidos con relación a Siria sigue siendo la misma, minimizando así las críticas del secretario de Defensa Chuck Hagel sobre que Washington ya no priorizaba la caída del presidente sirio, Bashar al-Asad.
“La política que hemos tenido respecto a (Bashar) al-Asad es muy clara: creemos que ha perdido su legitimidad para seguir en el poder”, dijo Earnest, asegurando, no obstante, que la prioridad ahora es derrotar al grupo takfirí EIIL (Daesh, en árabe) en Irak y Siria.
El jueves Hagel envió un informe a la asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Susan Rice, advirtiendo de que la política de Estados Unidos ante Siria no aclaraba sus intenciones con respecto a Al-Asad. La actual ofensiva militar contra el EIIL en Irak y Siria, comentó, había relegado la intención primera de la Administración del presidente Obama de derrocar a Al-Asad
“Sí, Al-Asad podría beneficiarse” de los ataques de Estados Unidos a los terroristas del EIIL, aseguró Hagel, respondiendo a las preguntas de los periodistas en una rueda de prensa celebrada el jueves en el Departamento de Defensa de Estados Unidos, el Pentágono.
El portavoz del Pentágono, John Kirby, adujo el viernes que los funcionarios estadounidenses revisaban constantemente la estrategia de Siria y que la nota de Hagel no reflejaba desconexión en política.
“Como cualquier estrategia, tenemos que revisarla constantemente para garantizar que se está ejecutando correctamente”, dijo Kirby. “Creo que es de lo que el secretario estaba hablando ayer”, aseveró.
El Pentágono, desde el pasado mes de agosto, realiza incursiones aéreas contra el EIIL en Irak, y a finales del mes de septiembre, comenzó una campaña militar similar contra el grupo terrorista en Siria.
Los analistas dudan de que Washington busque realmente combatir el terrorismo con estos ataques, ya que, según distintos informes, Estados Unidos ha tenido mucho que ver en la creación del EIIL que, en su momento, actúo con la connivencia de parte de la comunidad internacional.
El EIIL, con miles de integrantes europeos, norteamericanos y regionales, está cometiendo crímenes de lesa humanidad tanto en Siria como en Irak, entre ellos, ejecuciones sumarias y secuestros masivos.
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