Los movilizadores bareiníes además de condenar las medidas brutales de las fuerzas del régimen de Manama, han correado consignas contra Al Jalifa.
El acto de protesta ha tenido lugar en la zona Al-Die, en Manama, la capital bareiní, y fue convocado por distintos movimientos opositores de la monarquía árabe, bajo el lema “la gente no aceptará la humillación”.
Asimismo el movimiento opositor bareiní, Coalición de Jóvenes de la Revolución del 14 de Febrero, ha pedido la amplia presencia de revolucionarios en los actos de protesta con el fin de acelerar la caída del régimen bareiní en un futuro cercano.
Por otra parte, los saudíes han realizado este mismo día, otra manifestación antigubernamental en la región Al-Awamie, de la provincia oriental, Al-Qatif, para exigir la liberación de los prisioneros políticos.
Refiriéndose a la brutal represión del régimen contra su pueblo chií, los participantes en el mitin, han declarado que dichos actos represivos no pueden detener la revolución de los musulmanes saudíes.
También en un comunicado emitido ese mismo día por los manifestantes, los opositores del régimen saudí al expresar su solidaridad con los presos políticos, han denunciado las continuas políticas hegemónicas y discriminatorias del régimen Al Saud.
Desde el inicio del despertar islámico en la región en 2011, los saudíes y bareiníes vienen realizando manifestaciones pacíficas casi diariamente para exigir la liberación de los presos políticos, libertad de expresión, la aplicación de reformas políticas y el fin de la escalada de discriminación economía, social y religiosa.
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