Un ataque con explosivos de las FARC contra el oleoducto Caño Limón-Coveñas, el más largo de Colombia, detuvo su funcionamiento y causó un derrame de crudo que afectó a tres localidades del departamento de Arauca, en la frontera con Venezuela. A consecuencia del derrame se cerraron los acueductos de Arauca y Arauquita, y representa un gran riesgo para el ecosistema.
El Caño Limón-Coveñas tiene 770.000 kilómetros de longitud y transporta unos 80.000 barriles de crudo hasta el puerto de Coveñas, en el Mar Caribe, para su exportación.
Mientras tanto, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, visitó el sureño y selvático departamento del Caquetá, donde el pasado viernes las FARC dinamitaron un puente integrado en la actividad petrolera. "Este ataque terrorista, como todos los ataques terroristas que hemos visto en los últimos meses, lo que buscan es desesperar a la gente, pero no tiene ninguna ventaja militar", dijo el mandatario.