lunes, 6 de abril de 2015

La Caravana Antifascista al Donbass pasará esta semana por Madrid

El próximo viernes día 10, en el Centro Atalaya de Vallecas, Banda Bassotti tiene previsto participar en Madrid en un concierto para recaudar fondos a favor de la Caravana Antifascista al Donbass. En el concierto actuarán también los grupos Kaos Urbano, Suzio 13 y Hazte Caso Primo. Antes del concierto, una concentración mostrará su oposición al “Madrid de la censura y la represión”, tal y como anuncia el cartel de la convocatoria.

La organización del acto corre a cargo de la Brigada Rubén Ruiz Ibárruri, la Sección de la Caravana creada en España y que toma su nombre del famoso comunista vizcaíno, hijo de La Pasionaria. Ruiz Ibárruri murió, con apenas 22 años, en la batalla de Stalingrado.
El objetivo del concierto es recaudar fondos para la Caravana Antifascista al Donbass, promovida por la banda italiana. Lo explican de manera detallada los organizadores en su web:

LA CARAVANA ANTIFASCISTA 2015 es un acto político y humanitario en el que personas de todo el mundo acudirán a la región del Donbass a mostrar su solidaridad con el pueblo que sufre las consecuencias de una guerra imperialista cruel que se ha llevado por delante decenas de miles de vidas y ha truncado el destino del pueblo de Novorossia, que lucha hoy por su dignidad.

Esta Caravana, que surge a iniciativa del grupo italiano Banda Bassotti, como su antecesora en 2014, es un acto de solidaridad internacionalista que pretende llamar la atención sobre la situación real de este conflicto. Mujeres y hombres comprometidos con el antifascismo y con la libertad que se acercarán a tender la mano al pueblo novorruso para ser su voz y sus ojos frente a las mentiras de los medios occidentales, que silencian la magnitud de este genocidio y la naturaleza de sus responsables.

Como lo resume en Público Joan Cantarero, se trata de “trasladar a la ciudadanía las iniciativas puestas en marcha, recaudar fondos para financiar la caravana, grabar un documental de la situación actual de la región, y financiar en lo posible proyectos solidarios con las víctimas de la Región del Donbass”.

En la Caravana al Donbass participarán militantes de distintas partes del mundo. Confluyendo en algún punto de encuentro de Rusia cercano a Donbass, la caravana se dirigirá con posterioridad a Lugansk. Ahí se dará cumplida respuesta a la invitación formulada a Banda Bassotti en octubre del pasado año por las autoridades de la República Popular de Lugansk, tras el concierto que el grupo italiano ofreció en Donetsk unas semanas antes. La actuación de la banda romana en Lugansk, junto a los demás grupos que se incorporen a la Caravana, será el 9 de mayo. Se enmarcará en los actos conmemorativos del 70 aniversario de la victoria soviética contra las tropas nazis.

La mayor preocupación de la organización es que el Ayuntamiento de Madrid y la Delegación del Gobierno puedan intervenir, actuando como hicieron el pasado marzo, prohibiendo a última hora la actuación en Madrid del grupo gasteiztarra Soziedad Alkoholica.

Como viene siendo habitual, la ultraderecha ucraniana en España parece estar movilizándose para impedir el acto. Según señala Cantarero, “los organizadores han recibido a través de la redes sociales amenazas contra el concierto por parte de grupos neonazis ucranianos asentados en España [] Les han llegado también noticias de que la legación diplomática ucraniana ha mostrado su malestar al Gobierno español por la celebración de este concierto en favor de los separatistas del Donbass”.

Sería lamentable que intereses de extremistas extranjeros volvieran a condicionar el uso de la libertad de expresión en nuestro país. Pero el miedo se está extendiendo. En este contexto, más propio de la vieja dictadura franquista o del actual régimen autoritario de Kiev que de una democracia, los promotores del evento han difundido un “Manifiesto de Solidaridad con el Concierto de Banda Bassotti en Madrid apoyando la Caravana Antifascista 2015”.

Reproducimos íntegramente este manifiesto a continuación, esperando que los responsables políticos del Ayuntamiento de Madrid y de la Delegación del Gobierno de España en Madrid sean capaces de anteponer los principios democráticos a las presiones del fanatismo banderista, garantizando los derechos de la ciudadanía, en particular el derecho a la libertad de expresión. La prohibición de un acto de vocación humanitaria y solidaria, que no supone ningún riesgo grave para cualquier policía profesional y de vocación democrática, sólo podría ser interpretada como un retroceso a aquel país del franquismo en el que la autoridad competente autorizaba o prohibía a su antojo cualquier tipo de acto.

caravana antifascista madridMANIFIESTO DE SOLIDARIDAD CON EL CONCIERTO DE BANDA BASSOTTI EN MADRID APOYANDO LA CARAVANA ANTIFASCISTA 2015


El Partido Popular nos persigue, nos amordaza, nos censura sin razones ni explicaciones, solo por ser solidarios, solidarias y consecuentes.
Somos miembros de la Caravana Antifascista Banda Bassotti, mujeres y hombres activistas, de medios de contra información, integrantes de distintos movimientos sociales, que nos marcharemos el próximo mes de mayo al Este de Ucrania en una caravana antifascista con una clara misión:
– Prestar ayuda humanitaria a la población civil de la región de Donbass, víctimas de una guerra injusta que se ha cobrado miles de vidas y que amenaza con enquistarse en Europa, una guerra imperialista y cruel, como todas las guerras, en las que los intereses del capital se han impuesto a la voluntad de un pueblo que quiere vivir en paz.
– Mostrar nuestra solidaridad realizando acciones informativas en diferentes pueblos de la región, con el objetivo de realizar un documental que cubra nuestra perspectiva del conflicto y sea la voz de los sin voz.
Esta idea se ha gestado gracias al grupo musical italiano Banda Bassotti, ampliamente reconocido en Europa, un grupo de músicos y activistas antifascistas que han mostrado un abierto compromiso con el Donbass y contra la guerra genocida.
Para poder financiar la ayuda material que queremos llevar al pueblo de Donbass, hemos organizado un concierto en Madrid con varias bandas de música, entre ellas la propia Banda Bassotti, un concierto completamente autogestionado por cientos de manos voluntarias que queremos que sea un espacio de encuentro y debate, de ocio y cultura crítica, que de voz a nuestro proyecto.
Nuestro objetivo era celebrarlo en un espacio público, pero hemos recibido las amenazas del Partido Popular y delegación de Gobierno: tienen claro que no van a permitirnos pronunciarnos y están dispuestos a llegar hasta donde haga falta para lograrlo.
¿Qué queremos?
– Queremos acabar con la censura en Madrid: la censura política que se ha cebado con grupos como Soziedad Alcohólika, DefconDos, Fermín Muguruza y la propia Banda Bassotti, que dan conciertos en todo el mundo, menos en Madrid. Acabar con la censura a las actividades culturales en la calle, a los centros sociales: queremos una ciudad integradora donde la libertad de expresión y el derecho a la cultura popular sea una realidad y no un deseo.
– Queremos poder llevar a cabo nuestro concierto, un evento solidario, transparente y abierto, unas jornadas de lucha en la que todas y todos estáis invitadas, sin temer la represión, las agresiones policiales, sin miedo.
– Queremos defender los centros sociales de todos los pueblos del Estado Español, como espacios de libertad, populares y solidarios. Centros como la Traba, como el Patio Maravillas, como La Casika, como la Atalaya, como Can Vies, como Kukutxa, como la Casa de la Muntanya, constantemente amenazados, desalojados, despreciados, pero que se levantan día a día con el trabajo de vecinas y vecinos.
¿Qué necesitamos?
Necesitamos todo el apoyo popular en este pulso contra la censura, contra la represión y el Estado policial que el partido Popular y su delegación de Gobierno han instaurado en Madrid.
Por eso, convocamos el mismo día del concierto, 10 de abril, a las 17:00 horas, a las puertas del Centro Social Atalaya de Vallecas, junto con vecinas, de activistas, de solidarios y solidarias que dejen claro que no estamos dispuestas a ser amordazadas una vez más. 

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