El Gobierno de Ankara condicionó su apoyo militar a los kurdos para evitar la caída de la ciudad siria de Kobani (norte) en las manos del grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) a que ellos expresen formalmente su oposición con el presidente sirio, Bashar al-Asad.
Salih Musilm, el líder del Partido de la Unión Democrática (PYD, por sus siglas en kurdo), el principal partido político kurdo de Siria, se reunió el sábado con funcionarios de la Agencia Nacional de Inteligencia de Turquía (MIT, por sus siglas en turco), ha anunciado este domingo el diario turco Hürriyet.
Según la fuente, la contraparte turca dijo a Musilm que los kurdos de Siria, además de manifestar su enemistad con Al-Asad, deben sumarse a las filas de la que llama “oposición moderada” siria.
Además, llamó al PYD a romper sus vínculos con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK, por sus siglas en kurdo).
Kobani (conocida como Ain al-Arab, en árabe) es una ciudad que está cerca de la frontera siria con Turquía amenazada por el EIIL desde mediados del pasado septiembre.
El Gobierno del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, se niega a desempeñar un papel constructivo y apoyar a los kurdos en defensa de esa ciudad aunque anunció hace días su decisión para combatir al EIIL. Tal y como declaró Erdogan, el derrocamiento del Gobierno de Damasco sigue siendo su “prioridad” y no EIIL.
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