lunes, 18 de agosto de 2014

Una verdadera crisis de valores

Por Elson Concepción PérezLos negros en Estados Unidos son los más pobres, los más perseguidos y maltratados por la policía; los más afectados por un sistema educacional que los margina.

Parece una paradoja: Estados Unidos donde por primera vez en la historia un negro ha llegado a ser Presidente, la desigualdad racial y social aparecen enquistadas en un contexto donde se evidencia una verdadera crisis de valores.

Que un oficial blanco de la policía de Misuri haya matado a balazos a un joven negro de 18 años, Michael Brown, es solo la última de las reiteradas expresiones racistas en una sociedad enferma y corroída por males que no encuentran cura.


En las manifestaciones de protesta por la muerte de Brown, este fin de semana, también la policía blanca disparó contra otro joven negro que se reporta en estado crítico en el hospital al que fue remitido, sin que se diera a conocer su identidad.

En ese contexto, el gobernador del Estado de Misuri, Jay Nixon, luego de declarar estado de emergencia, dijo que “los ojos del mundo nos están observando”; en un mensaje evidentemente justificativo, que ha provocado más reacciones contra las autoridades.

La repercusión nacional e internacional que ha tenido esta muerte, refleja uno de los problemas más delicados de la sociedad norteamericana: la desigualdad racial.

De acuerdo con reportes de BBC Mundo, un estudio presentado en 2013 por el Urban Institute, un instituto de análisis económico en Washington, concluyó que los blancos tienen en promedio seis veces más riquezas que los negros y los hispanos.

De igual forma, según la Comisión de Sentencias de Estados Unidos, una agencia independiente en la rama judicial, los hombres negros recibieron sentencias 19,5 veces mayores que sus pares blancos en situaciones similares.

A su vez, mientras los afronorteamericanos son el 12% de la población del país, también representan el 40% de las personas encarceladas en Estados Unidos, según informó en agosto la Universidad de Stanford, en California.

Además, los hombres negros tienen seis veces más probabilidades de ir a la cárcel que los blancos y 2,5 veces más que los hispanos, de acuerdo con un informe de The Sentencing Project, una institución que aboga por un sistema criminal justo.

El propio reporte informativo refiere que la Oficina de Derechos Civiles del Departamento de Educación de Estados Unidos encontró que los estudiantes negros son suspendidos y expulsados tres veces más que sus pares blancos (16% vs. 5%) en los colegios.

Un encuesta reciente refleja que el 68% de los negros cree que son tratados de manera más injusta en las cortes, el 54% en el trabajo y el 51% en los colegios públicos.

Otro informe de la Oficina del Censo señala que el número de estadounidenses que viven en la pobreza aumentó en 2012 hasta los 46,5 millones. Pese a que la economía del país mejoró a nivel macroeconómico, el número de personas a las que se considera pobres aumentó en 300 mil; y lo más grave es que unos 16,1 millones de niños están en la pobreza, así como 3,9 millones de adultos mayores de 65 años.

Refiere el propio documento que la pobreza en el 2012 fue más pronunciada entre negros (27,2% o 10,9 millones de personas), hispanos (25,6% o 13,6 millones) y asiáticos (11,7% o 1,9 millones) que en los blancos no hispanos (9,7%).

En cuanto a la educación, un informe preparado para el Departamento de Educación de Estados Unidos, hace un año, fue contundente: “Ninguna otra nación desarrollada tiene desigualdades tan profundas o sistémicas; ninguna otra nación desarrollada ha generado, a pesar de algunos esfuerzos, tantas condiciones desfavorables para muchos de sus niños”.

El argumento se refiere al sistema colegial en el país y el informe resalta las disparidades educativas que existen entre los distintos grupos sociales, reporta BBC.

El documento asegura que el sistema educativo está “segregado” tanto en temas de ingresos y riqueza como de raza. Y explica que hay 10 millones de estudiantes en las comunidades más pobres que están afectados por un sistema que los vincula a los profesores y escuelas de menor rendimiento, así como a expectativas y oportunidades me­nores.


Granma

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Añade tu opinión sobre este artículo