Mantiene Líbano control en frontera tras arrestar grupo armado sirio

Beirut, 20 abr (PL) Efectivos regulares y de inteligencia del Ejército libanés mantuvieron hoy un riguroso control en áreas fronterizas del valle de la Bekaa, tras arrestar a miembros de un grupo extremista armado que cruzó ilegalmente desde Siria.Los chequeos en la porosa línea limítrofe se intensificaron como parte del plan de seguridad puesto en marcha a finales de marzo pasado, aunque tropas de inteligencia de El Líbano se concentraron en el poblado de Beit Lahia, en la sureña provincia de Rashaya, en la Bekaa.

En esa localidad los uniformados capturaron el sábado a seis islamistas radicales de nacionalidad siria que poseían armas luego de una emboscada para frustrar su ingreso ilegal al territorio nacional.

Días atrás, las Fuerzas Armadas libanesas capturaron a 12 sirios en la periferia de la aldea de Arsal, también en la Bekaa, por entrada ilegal y posesión de armas, a algunos de los cuales se les incautaron granadas, fusiles y pistolas, además de identificación falsa, según se precisó.

El comisionado gubernamental para la Corte Militar, juez Saqr Saqr, presentó el miércoles último cargos contra varias personas, algunas fugitivas, por pertenecer a la organización terrorista Frente Al-Nusra, que combate contra el Gobierno de Bashar Al-Assad en Siria.

Además, los acusados deberán comparecer ante el tribunal por perpetrar actos terroristas y preparar o activar carros bomba en el país, según fuentes judiciales que también informaron del arresto un día antes de dos sirios por tráfico de dinero falso en Chtoura.

Las detenciones e imputaciones se insertan en el aludido plan de seguridad del Gobierno del primer ministro libanés, Tammam Salam, mediante el cual se pudo apresar hace más de una semana al jefe de una de las más peligrosas bandas de robo de vehículos en la Bekaa, tras tiroteos y varios heridos.

Dicha ofensiva se aplica igualmente en la norteña ciudad de Trípoli, escenario de enfrentamientos sectarios entre chiitas y sunnitas que apoyan y se oponen, en ese orden, al presidente sirio Al-Assad.

Fuerzas de Seguridad Interior arrestaron en la localidad de Ain Yaacoub, en Akkar, a un libanés perseguido por la justicia y considerado combatiente y francotirador profesional en el barrio chiita de Jabal Mohsen, en Trípoli.

En aquella urbe portuaria el juez Saqr imputó indistintamente a más de 40 residentes de los vecindarios rivales -Jabal Mohsen y el sunnita Bab El-Tebbaneh- por formar grupos armados para cometer desórdenes, atacar al Estado y sus instituciones, y asaltar dependencias civiles y militares.

Además, los encartados enfrentan cargos de participar en batallas callejeras en la ciudad, asesinato, intento de asesinato y daños a la propiedad, debido a los fieros enfrentamientos de hace más de un mes que causaron unos 30 muertos y más de 150 heridos de ambos bandos.

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