jueves, 17 de diciembre de 2015

Engaños Electorales (3). ¿Ha fracasado el socialismo?

En los debates electorales en los que nuestro partido ha podido participar, se constata el miedo y el talante antidemocrático de la derecha. Ante nuestros argumentos ésta ha intentado interrumpir nuestro discurso sobre la base de vocerío e intimidación, bien reprochándonos lo que ellos suponen que ocurre en Cuba u otros lugares, bien gritando que nuestras ideas son antiguas, que  el socialismo ha fracasado. Pero sin esgrimir ningún razonamiento al respecto, el fin
que persiguen es que nuestra voz no llegue al pueblo.

¡EL SOCIALISMO HA FRACASADO!  Tras esta sentencia, la derecha se permite el lujo de negarnos la celebración de mítines, incluso también manifestaciones etc. Pero no solo la derecha, también la falsa izquierda, para ocultar su traición se llena la boca pronunciándola y así dar credibilidad a su socialismo del siglo XXI,  y otros, acuñados por la burguesía.

Quienes afirman que el socialismo ha fracasado solo demuestra una ignorancia absoluta de la historia. Esta no camina en línea recta, hay interrupciones y retrocesos circunstanciales hasta que lo nuevo se impone. La derecha y la falsa izquierda desconocen que la clase social que ellos adoran, la burguesía, no conquistó el poder de una vez y para siempre. En  Francia y otros lugares, la burguesía triunfante tuvo que ceder ante la nobleza rehecha por lo que la alternancia en el poder por implantar cada una su sistema –capitalismo o feudalismo- duró más de un siglo, hasta que la burguesía portadora de lo nuevo y del progreso se asienta definitivamente en el poder y pudo construir su sistema de producción.

Pero todo sistema nace, se desarrolla y muere, este proceso inevitable es una ley de la dialéctica y el capitalismo no escapa a ella. El socialismo es lo nuevo y representa el progreso supremo de la sociedad. Cierto que al igual que la burguesía, el proletariado y las clases trabajadoras están ahora en ese trance de perder y ganar. Más las experiencias de la Comuna de Paris, de la Unión Soviética, Cuba etc. nos aportan ricos antecedentes a tener en cuenta, unos negativos pero otros muy valiosos que nos ha de servir para vencer definitiva en los próximos lances. 

Hoy en día, la situación es distinta, las antiguas revoluciones tuvieron que hacer uso de los burócratas capitalistas porque los trabajadores no estaban preparados para llevar a cabo el papel de dirigente de la economía y de la política. Al contrario, hoy abundan los desempleados que tienen carreras, más el nivel de preparación es muy superior. Por ello, un cambio de sociedad en nuestro país, estaría garantizado por el avance técnico y científico y por el grado de preparación de la fuerza de trabajo.

Otra de las consideraciones que los enemigos del socialismo oponen es que el socialismo es un invento y no es posible socializar nada dado que el ser humano es egoísta por naturaleza, naturalmente, no es este el lugar adecuado para esta discusión. Pero ¿Es cierto que es imposible la socialización económica de la sociedad humana? Quienes así opina se conducen porque tienen una conciencia malformada producto de su escaso conocimiento de cómo está estructurado el capitalismo, o tienen intereses creados.

No solo el socialismo es posible, sino que además se está dando en estos momentos y en este país y en todos los países capitalistas desarrollados. En las grandes empresas: monopolios, multinacionales etc. el socialismo en la producción es un hecho incuestionable. Desde la concepción del producto hasta su comercialización y venta, pasando por su producción lo llevan a cabo totalmente trabajadores asalariados, con mayor o menor salario, pero asalariado -desde el ingeniero hasta el peón-. ¿Acaso los accionistas, van todos los días a sus empresas a organizar el trabajo, a producir con sus manos las mercancías, a venderlas y a llevarlas al consumidor? Es evidente que no, porque en las empresas grandes es inevitable la socialización del trabajo, pero solo existe la socialización del trabajo, más no están socializadas las ganancias. Por tanto la gran empresa ha convertido a los capitalistas –accionistas- en parásitos de la sociedad que viven a costa de succionar la sangre de los empleados.

Lo que los comunistas pedimos no es una quimera, sino una exigencia social que ha impuesto el propio desarrollo del capitalismo. Este no tiene razón de existir, la historia lo impugna y le repugna, pues la única razón que le asiste al sistema capitalista es la de la fuerza, el terror y la mentira. Entre Francia, Inglaterra y EE.UU tienen un arsenal de armamentos capaz de destruir diez veces la humanidad. Actualmente tienen a medio mundo involucrado en guerras criminales, donde hombre mujeres y niños inocentes sufren sus consecuencias. La paradoja está escrita. El país más desarrollado del mundo capitalista –“democrático”- ha intervenido en 70 golpes de Estado en América Latina, ha lanzado dos bombas atómicas, y su credencial es la guerra de rapiña para robar a los pueblos sus riquezas naturales sumiéndolos en la pobreza extrema; mientras por el otro lado, la pequeña Cuba -“dictadura”- envía médicos a esos países para aliviar sus sufrimientos. Sin embargo, a decir, de los demócratas españoles, el socialismo es imposible y monstruoso.

El Partido Comunista Obrero Español se presenta a estas elecciones para utilizar todos los poquitos medios a su alcance, para luchar contra la mentira y el engaño a un pueblo que está sufriendo sin conocer aún los motivos,  ni el destino que le guarda la historia. Pero seremos implacables hasta alcanzar el ideal sublime de la humanidad: UN MUNDO LIBRE DE GUERRAS Y DE EXPLOTACIÓN.

VOTA AL PARTIDO COMUNISTA OBRERO ESPAÑOL (PCOE)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Añade tu opinión sobre este artículo