sábado, 13 de diciembre de 2014

Neo-nazis atacan la sede del Partido Comunista en Kiev

La noche del 10 de diciembre, un grupo de una veintena de jóvenes neonazis tapados con balaclavas y armados con barras de hierro, martillos y porras atacaron las oficinas del Comité Partido Comunista de Ucrania en el distrito de Shevchenko en Kiev. Como resultado del ataque, un miembro del partido resultó herido y tuvo que recibir tratamiento médico y la sede quedó destrozada.

El ataque tuvo lugar el mismo día en que las Juventudes Comunistas y organizaciones de veteranos participaron en una protesta frente a la alcaldía de Kiev contra la abolición de los beneficios sociales para los veteranos, estudiantes y otros grupos sociales vulnerables. La protesta reunió a más de 150 personas.

No es la primera vez que las bandas fascistas atacan la sede del Comité del Partido Comunista en Kiev, que ya fue arrasada el pasado abril. Desde la victoria del movimiento Euromaidan el pasado febrero, la campaña de ataques de las bandas fascistas, actuando con total impunidad, contra las sedes del Partido Comunista, contra cualquier manifestación o protesta y contra los activistas a lo largo y ancho del país ha sido continua.

Por su parte, el Estado ha iniciado el proceso para ilegalizar el KPU con un caso iniciado por el Ministerio de Justicia que, por el momento, sigue estando pendiente de estudio por parte de una corte del distrito de Kiev. El acuerdo de formación de la nueva coalición de gobierno incluye un punto sobre “la condena del régimen totalitario comunista y prohibición de la propaganda comunista, Nazi, y anti-ucraniana en cualquier forma. Completar de la eliminación del comunismo en todas las esferas de la vida pública”.

Los atacantes publicaron, orgullosos, un vídeo jactándose del ataque.

Las Juventudes del Partido Comunista respondieron al ataque con un comunicado:

“El 10 de diciembre de 2014, a las 18:00 se produjo un burdo ataque al comité del distrito Shevchenko del Partido Comunista de Ucrania. Una veintena de jóvenes con la cara cubierta, armados con barras de hierro, martillos y porras irrumpieron en el comité del distrito e hirieron a una persona, que tuvo que ser hospitalizada debido a los golpes recibidos en la piel y en las manos, que requirieron puntos. El material del Partido Comunista, ordenadores, material de oficina y muebles, fue brutalmente destruido.

El mismo día, comunistas, Konsomol Kiev y organizaciones de veteranos de la ciudad habían bloqueado la administración municipal de la ciudad contra la abolición de beneficios sociales para estudiantes y otros sectores desfavorecidos de la sociedad. Ese mismo día, “lord” Klitschko y su gente tuvieron que escuchar la verdad sobre ellos mismos y sobre sus actos directamente de la clase obrera. El ataque tuvo lugar pocas horas después de la protesta y nosotros, en Ucrania, ya no creemos que existan las coincidencias.

Ucrania ha establecido un régimen fascista, mafioso y oligárquico que cree que no es suficiente con la guerra civil en el país y ha declarado una guerra abierta a la clase obrera y al Partido Comunista como representante de sus intereses en Ucrania. Tras varios intentos de ilegalizar al KPU y de conseguir expulsar a los diputados comunistas del parlamento, las autoridades ucranianas han optado por la exterminación física de comunistas, miembros de las Juventudes Comunistas y otras mentes sensatas del país.

¡Despierta, Ucrania!

Como dijo Ernest Hemingway, “el fascismo es una mentira contada por matones”.

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